Geología

Las Montañas de Prades son un conjunto orográfico, un agrupamiento de sierras que se orientan en dirección NE-SW, siguiendo la línea de las cordilleras Prelitoral, de las que forma parte. Este conglomerado orográfico forma un conjunto tabular donde predominan las mesetas, aunque también podemos encontrar relieves abruptos y alterosos que tienen alturas por encima de los 1.000m.

Geológicamente las Montañas de Prades las forman dos unidades bien diferenciadas: el zócalo herciniano y la cobertera alpina. La primera, el zócalo herciniano, está formada por las rocas más antiguas que constituyen estas sierras, han sufrido muchas modificaciones y son fuertemente afectadas por la erosión, por lo que el relieve es suave, en forma de colinas, con algunas agujas y acantilados aislados. La segunda unidad, la cobertera alpina, formada por rocas triásicas y jurásicas, con una resistencia variable a la erosión, es la que adquiere dicha forma tabular, con grandes acantilados abruptos y continuos, coronados por extensas superficies planas y valles fuertemente cortados allí donde la roca es más blanda.

Las Montañas de Prades son delimitadas tanto al norte como al sur por dos grandes fallas de dirección NE-SW. Al norte, la falla de Poblet señala el fin de los materiales paleozoicos propios de las Montañas de Prades y el inicio de los sedimentos paleógenos de la Cuenca del Ebro. Al sur la falla del Camp los separa de los sedimentos neógenos de la depresión del Camp de Tarragona. El límite viene dado por la falla de la Riba. El límite oeste no es tan claro como los otros, ya que es un cambio gradual con los materiales también paleozoicos del Priorat.